El desarrollo sustentable es un término acuñado a finales del siglo XX, que se refiere a un desarrollo respetuoso con el entorno, y que gracias a este respeto no compromete el futuro del planeta, ni en cuanto a recursos naturales, ni en la calidad de vida de los seres humanos, ni de las especies.

El desarrollo sustentable es un desarrollo por el cual el crecimiento económico, los recursos naturales y la sociedad (sus tres pilares) caminan de la mano, no prima el primero por encima de los demás.

¿Qué ejemplos prácticos de desarrollo sustentable conocemos?

Diferentes sectores desarrollan prácticas para un desarrollo sustentable que son beneficiosas tanto para el medio ambiente, como para la economía, y por supuesto para el ser humano. Veamos algunos ejemplos:

Arquitectura sustentable

La arquitectura sustentable tiene como prioridad el costo que genera para  el medio ambiente todos sus procesos, por lo que tiende, cada vez más, a edificar con materiales ecológicos y a dar respuestas naturales a las necesidades de las viviendas y sus habitantes.

Tendencias de arquitectura sustentable en boga son fachadas y azoteas vegetales, o los huertos urbanos. En Colombia, cada vez encontramos más edificios institucionales, industriales y privados que se suman a esta corriente, como por ejemplo los Escenarios deportivos de los Juegos Suramericanos (en Medellín), o el Centro Cultural Julio Mario Santodomingo (Bogotá).

Ciudades sustentables

En ellas, el desarrollo urbano (por supuesto la arquitectura, el punto anterior) y los sistemas de movilidad (el transporte público, sobre todo) tienen en cuenta factores medioambientales y sociales.

Los espacios públicos y las zonas verdes son una parte importante de su planeamiento; los carros y las personas conviven sin que el vehículo prime y cada vez se da más impulso a carros como los eléctricos, que no emiten gases de efecto invernadero.

En Bogotá, encontramos ejemplos como el piloto de taxis eléctricos o el de buses híbridos de Transmilenio. Las ciudades sustentables cuidan su agua, su planificación urbana, sus residuos, diseñan edificios amigables con el medio ambiente… Masdar, en los Emiratos Árabes, es la primera ciudad del mundo concebida como sustentable desde su diseño original.

Empresas sustentables

Cada vez más, las corporaciones apuestan por la eficiencia energética en sus hábitos y en sus edificios. Esto incluye medidas tan sencillas como subir un par de grados el aire acondicionado para gastar menos y tener menor huella ecológica, hasta calentar su agua o generar su energía con paneles solares.

En Colombia, son centenares las empresas que cada año optan a obtener certificación medioambiental Leed.

Turismo sustentable

El turismo es un importante motor de desarrollo, pero debe realizarse de manera responsable, para no convertirse en una carga para las comunidades de destino o futuras. Lo que es “pan para hoy” puede ser “hambre para mañana”, por lo que es clave ser respetuoso con el entorno.

Colombia es, precisamente, uno de los lugares del mundo con mayor biodiversidad, y registra al año 250.000 visitas internacionales solo relacionadas con el turismo sostenible o de naturaleza. No es de extrañar que el país tenga cada vez más empresas turísticas sustentables.

Transporte sustentable

El transporte sustentable es cada vez más una necesidad (necesitamos vehículos que no consuman combustibles fósiles y que a su vez no emitan Gases de Efecto Invernadero) y una realidad, gracias a modelos de transporte urbano sustentable como el de Bogotá. Y destaca, sobre todo, la bicicleta: el vehículo sustentable por excelencia, en cuyo uso nuestro país es líder en Latinoamérica.

Agricultura ecológica

La agricultura ecológica es un sector en alza, puesto que cada vez más consumidores están concienciados con el medio ambiente. Por un lado, este término se refiere al empleo óptimo de los recursos naturales, respetando el ciclo de la naturaleza, y por otro a los cultivos sin productos químicos. De esta manera, se obtienen alimentos orgánicos a la vez que se conserva la fertilidad de la tierra y se respeta el medio ambiente.

En Colombia, la producción de café es un muy buen ejemplo de evolución hacia un modelo de cultivo más responsable y sustentable. Este cultivo es de vital importancia para el medio ambiente y cuenta ya con indicadores aplicados a la realidad local.

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