El 5 de junio es el Día Mundial del Medio Ambiente, una fecha importante para celebrar y recordar la importancia de la viabilidad y eficiencia del Planeta. Te mostramos algunos de los hábitos sostenibles que puedes llevar a cabo en este día y, por supuesto, el resto del año.
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Recicla todo lo que puedas
El reciclaje debería ser una prioridad en todos los hogares. Es fundamental separar cartón, papel, plástico y vidrio correctamente para después depositarlos en los contenedores correspondientes. Y no sólo eso: también es importantísimo reciclar otros productos cotidianos como medicamentos caducados -que hay que depositar en contenedores SIGRE- o el aceite usado. Convertirlo en jabón o llevarlo a un punto limpio son las mejores soluciones. Nunca hay que echarlo por el fregadero: un litro de aceite contamina hasta 1.000 litros de agua.
Deja el coche aparcado en casa
En nuestra sociedad tenemos la mala costumbre de coger el coche para todo. Y en muchas ocasiones no es la mejor opción, aunque a primera vista nos resulte más cómodo. Utiliza la bicicleta para trayectos cortos como para ir a por el pan o algún otro recado; viaja en tren o en autobús para ir a trabajar o camina siempre que puedas. Además de ser mucho más económico para nuestro bolsillo, es saludable y el Planeta te lo agradecerá.
Reserva un hotel sostenible
La sostenibilidad debería ser un criterio fundamental a la hora de elegir nuestras vacaciones. Hay una gran oferta de destinos ecológicos y hoteles que cumplen una serie de criterios sostenibles para minimizar su impacto en el entorno. Acciones como el uso de productos ecológicos, la instalación de placas solares para generar energía limpia, los sistemas de ahorro de agua o el respeto por la cultura local marcan la diferencia entre un alojamiento sostenible y otro que no lo es. Consulta nuestra sección de Turismo Sostenible para más información.
Evita las bolsas de plástico
Las bolsas de plástico son uno de los productos más contaminantes que existen por varias razones: para producirlas se consume una gran cantidad de energía y tardan en degradarse más de medio siglo. Intenta no utilizar bolsas de plástico de usar y tirar, y si no te queda más remedio, procura reutilizarlas todo lo que puedas. Lo mejor es comprar bolsas de tela, reutilizables o recurrir al tradicional carro: es mucho más cómodo llevar la compra rodando.
Sustituye el baño por la ducha
Uno de los lugares dónde más agua podemos ahorrar en el hogar es el cuarto de baño. Además de la importancia de no dejar los grifos abiertos, otra forma de no desperdiciar este recurso natural tan valioso es sustituir el baño por una ducha rápida. Reducir el tiempo que pasamos bajo el chorro de agua es fundamental: por cada minuto ahorrarás 20 litros de agua.
