La gestión y regulación del tráfico es un conjunto de actividades que, sin modificar físicamente la ciudad, intervienen en su funcionamiento. Algunas de las medidas empleadas para estas actuaciones son:
– Prohibiciones de paso: para reducir el tráfico de determinados vehículos ciertos días y horas
– Reordenaciones de tráfico: que consisten en la eliminación del tráfico de paso, haciendo dar un rodeo a los vehículos para impedir que pasen a una determinada zona
– Prioridad a otros medios de transporte: mediante la segregación de parte de la calzada para transporte público, bicicletas, motos…, con tiempos de regulación en semáforos o permitiendo giros.
– Control de accesos a vehículos no autorizados: con elementos mecánicos, como puede ser el caso de una zona de residentes restringida al paso
– Pago por uso: para reducir el número de vehículos en una zona. Ejemplos de ello son los parquímetros o el peaje urbano.
Los semáforos pueden cumplir muchas de estas funciones. En las intersecciones sirven para que no se bloquee su funcionamiento interno y que no se produzcan frenadas y arranques frecuentes, así como pérdidas de tiempo innecesarias. Para ello es imprescindible una buena coordinación entre ellos. También son necesarios para que los peatones sean tenidos en cuenta y se sientan protegidos.
Para controlar todos estos elementos de regulación se utilizan sistemas centralizados, que suelen contar con gran cantidad de detectores para informar sobre la situación del tráfico, así como otros datos útiles para el sistema de gestión y los usuarios.
Los últimos detectores y sistemas de ITS (en ingles “Gestión Inteligente del Tráfico”) disponen de algoritmos para estimar la intensidad de saturación de la vía y así gestionar la congestión. Permiten, por ejemplo, restringir el paso a vehículos a la zona congestionada actuando sobre el tiempo de verde en los semáforos en el sentido de la vía necesario.
Con todos estos sistemas de control gracias a las nuevas tecnologías, pasamos del tradicional “Control del tráfico” a lo que puede llegar a ser una “Gestión Integral de la Movilidad”, como el sistema que presenta el Ayuntamiento de la Ciudad de Granada, que, además, suelen tener como soporte un Sistema de Información Geográfica.
Las ITS ya están en pleno funcionamiento en Latinoamérica
Medellín ganó el premio “International Sustainable Transport Award 2012”, principalmente debido a la implantación de tecnología inteligente que facilita la interconexión de su transporte público y el control de tráfico de la ciudad.
El sistema “Hermes”, implantado por Indra, va a permitir un seguimiento continuo de la evolución del tráfico y la monitorización en tiempo real de los diferentes subsistemas de control. De este modo, se incrementará la seguridad, se optimizará el flujo de vehículos y se reducirán los tiempos de circulación, los costes y el impacto medioambiental.