Conocidas como uno de los vehículos eléctricos más utilizados, las motos eléctricas compiten en el mercado como una de las alternativas de transporte más sostenibles. En este artículo te presentaremos las ventajas de las motos eléctricas, estas cómodas motocicletas que puedes comprar o alquilar para movilizarte por tu ciudad.
Indice de contenidos
Ventajas de las motos eléctricas: ¿qué las hacen tan demandadas?
No emiten gases tóxicos
Al no usar gasolina, la primera de las ventajas de las motos eléctricas es que no emiten gases contaminantes, tales como óxidos de nitrógeno (NOx) o partículas finas PM10, responsables de la contaminación atmosférica de las ciudades. Sus tubos de escape tampoco expulsan dióxido de carbono (CO2), uno de los gases responsables del efecto invernadero.
Estas ventajas de las motos eléctricas resultan importantes teniendo en cuenta que, según la Unión Europea, 40% de las emisiones de CO2 y 70% de las de otros contaminantes atmosféricos se originan en el tráfico rodado de los núcleos urbanos.
Medio de transporte silencioso
Las motos eléctricas son muy silenciosas. Arrancar uno de estos vehículos no emite ni un solo decibelio. De esta forma, se evita el problema de la contaminación acústica, un problema que afecta la calidad de vida de muchas personas que viven en las grandes ciudades.
Ahorro económico
Además de las ventajas de las motos eléctricas relacionadas al medio ambiente, este medio de transporte nos ayuda a ahorrar dinero. Si bien el precio de compra de uno de estos vehículos sostenibles es un poco mayor a los modelos de combustión, la inversión inicial se amortiza a medio plazo.
Cargar las baterías de una moto eléctrica para recorrer 100 kilómetros cuesta menos de 0,50 céntimos de euros, mientras que el coste de un scooter de gasolina, por ejemplo, ronda los 7,50 euros. Con todo, un vehículo eléctrico nos permite ahorrar más de 90% en el combustible, a lo que hay que sumarle un reducido coste de mantenimiento.
Algunos estudios calculan que el recorrido medio de un usuario en moto es de unos 27 kilómetros al día, una distancia fácilmente abarcable con la autonomía de una moto eléctrica que, según el modelo, puede circular entre 70 y 100 kilómetros por recarga. Lo mejor de todo: solo necesitas un enchufe para cargar las baterías.
Comodidad ante todo
No hace falta ir a una gasolinera para llenar el depósito. La moto eléctrica se puede recargar durante la noche con solo enchufarla a una toma de corriente. Algunos modelos cuentan incluso con baterías extraíbles que te permiten subirlas a casa. En dos o tres horas podemos cargar hasta 80% de las pilas.
Menos mantenimiento
Por si fuera poco, el motor eléctrico tiene menos riesgo de averías y no precisa de cambios regulares de filtros y aceites, como sí necesitan las motos de gasolina. Este aspecto es uno de los puntos fuertes de los vehículos eléctricos, si los comparamos con los de combustible.
El desarrollo de baterías más ligeras y con mayor autonomía, junto a la creación de una red con puntos de recarga en lugares públicos, son clave a la hora de desarrollar estos vehículos eléctricos que, sin duda, juegan un papel fundamental en el futuro de la movilidad sostenible, ¿no crees?