Si, cada uno tenemos voluntad pero a veces no falta conocer la eficacia de nuestra contribución pero siempre nos cuesta saber cómo dar el primer paso. Cada sector cuenta: y no es lo mismo una recomendación para el transporte, para los hogares, los edificios de oficinas, industria, cada cual tiene un lenguaje propio y su parte en el total de la meta. Quien suma todas las aportaciones, qué recomendaciones deben llevarnos a esa visión de energía de futuro, siempre pensando en lo posible, en lo menos costoso de implementar o en lo que la tecnología puede hacer por nosotros.
El pasado 19 de febrero tuvo lugar la presentación de un estudio en el Club Español de la Energía. Desarrolla tres trabajos sobre temas de especial interés, como son la oferta y demanda de energía en España a largo plazo, la eficiencia energética y la protección del consumidor.
El resumen de su presentación puede verse en el acceso de Enerclub
En el duro contexto energético actual, donde se están dando importantes pasos hacia el diseño de una nueva estrategia energética para la UE, con nuevos objetivos para el año 2030, y en el que se están produciendo reformas complejas, toda ayuda es poca.
Nuestra aportación se ha centrado en elaborar unos “Escenarios de ahorro y eficiencia energética aplicados a diferentes sectores”, mirando al año 2030, para que España afronte su tercer objetivo de reducción del 20% del consumo de energía primaria, de la manera más centrada y eficaz posible.
Esta aportación suma el conocimiento de personas de dilatada experiencia, 16 voluntarios y el apoyo del Institute for Prospective Technological Studies (IPTS) de la Comisión Europea. Quisiera agradecer y recordar a Juan Antonio Cabrera, de CIEMAT, persona entrañable y amigo que nos dejó antes de ver la luz de este trabajo. Juan Antonio ya está tu trabajo enviado a nuestro futuro.
Horacio Cocles, en el 508 a.C. defendiendo el último puente romano sobre el Tiber decide derribarlo para proteger Roma del ataque de los Etruscos. En aquel momento arenga a sus tropas “¿Qué mejor manera de morir puede tener un hombre, que la de enfrentarse a su terrible destino, defendiendo las cenizas de sus padres y templos de sus dioses?
De Thomas B. Macaulay 1842: “Lays of Ancient Rome”
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