El hueso de aceituna es un excelente combustible, debido a su elevada densidad y alto poder calórico (4.500 calorías/gramo). Por este motivo, hoy en día es posible encontrar estufas de hueso de aceituna, cuyas características te presentaremos en las próximas líneas.
Indice de contenidos
Dos kilos de hueso de aceituna son capaces de calentar lo mismo que un litro de combustible. Además, el precio por utilizar una estufa de hueso de aceituna supone 70% menos que una de gasóleo, un ahorro en gasto de combustible que se nota rápidamente en el bolsillo del consumidor.
En el mercado existen varios tipos de calderas de biomasa que utilizan desechos de materia orgánica como fuente de energía: cáscara de almendras, pellets (cilindros de biomasa compacta), astillas, cáscaras de piñón, leña… La utilización de estos materiales contamina menos que los combustibles fósiles, ya que el CO2 que liberan en su combustión es propio de su ciclo natural y no emite sustancias nocivas.
Otra ventaja importante es que con las estufas de hueso de aceituna -y de biomasa en general- se está utilizando un material que antes considerábamos un residuo.
El hueso de aceituna triturado como fuente de energía limpia es más barato y respetuoso con el medio ambiente que otros materiales, como los pellets. ¿Las razones? Los huesos de aceituna proceden directamente del proceso de molienda de las olivas en las almazaras donde, mediante deshuesadoras en húmedo, se consiguen separar del resto de componentes y secarlas.
Aquí los costes de transporte son inexistentes, ya que son los mismos que para la producción del producto principal: el aceite de oliva. En cambio, en la obtención de pellets de biomasa procedente de la poda de árboles sí se deben triturar y transportar a las plantas de procesamiento.
El coste de desarrollo del producto final en el caso del hueso de aceituna es también menor que otros tipos de biomasa. Un proceso de limpieza y secado del hueso es suficiente para tener el producto listo. Por su parte, los pellets necesitan un proceso adicional de compactación que añade costes al producto final.
En España se obtienen cada año alrededor de 500.000 toneladas de hueso de aceituna de la industria olivarera como desecho natural. Una cifra que, tras su tratamiento de limpieza y secado, disminuye a unas 400.000 toneladas anuales. Traducido en aprovechamiento energético, toda esta biomasa podría dar servicio a 85.000 calderas domésticas de hueso de olivas.
Andalucía es la comunidad autónoma española donde más empresas se dedican a la distribución del hueso de aceituna como fuente de energía limpia. Además, no solo son líderes en la distribución, sino también en el consumo industrial de biomasa: Jaén es la provincia de mayor consumo térmico de biomasa de Andalucía, alcanzando 32% del total andaluz.
La buena noticia es que el uso industrial de este tipo de energía limpia no es el único que está creciendo en nuestro país: el uso residencial de las estufas de hueso de aceituna para calefacción y agua caliente sanitaria también está en auge.
En Twenergy seguimos comprometidos con ofreceros herramientas prácticas para mejorar vuestra calidad de vida mientras…
El pasado 17 de octubre tuvimos un invitado de lujo en nuestro Directo que Deja…
La pintura aislante térmica se ha convertido en una solución innovadora para mejorar la eficiencia…
En un mundo cada vez más dependiente de la energía, garantizar un uso eficiente y…
En la entrevista en directo del mes de septiembre, de nuestra sección "Directos que Dejan…
Los terremotos, uno de los desastres naturales más impredecibles y devastadores, no solo causan daños…