La idea general para ahorrar gas en casa es reducir el consumo, lo que se puede conseguir con medidas que serán diferentes según empleemos el gas natural para calefacción, agua caliente o para cocinar. En este post te damos las claves para que puedas bajar el importe de tu factura. ¡Continúa leyendo!
Indice de contenidos
Medidas para ahorrar gas en casa
Calefacción de gas
La calefacción es el consumo que más influye en la factura final, por lo que cualquier cambio supone un ahorro importante. Estas son algunas acciones que te ayudarán a ahorrar gas en casa:
- Mantener una temperatura constante entre los 18ºC y los 21ºC durante el día cuando se esté en casa. Esta suele ser la temperatura ideal de la calefacción.
- Reducir la temperatura al salir de casa o apagarla según lo rápido que se enfríe la vivienda; ya que si baja mucho volver a alcanzar una temperatura agradable supone un gran consumo. Evidentemente, el tiempo que se va a estar fuera de casa es limitado, puesto que en ocasiones cuando el periodo es muy largo compensa apagarla y volver a encenderla cuando se llegue a casa.
- Realizar un mantenimiento adecuado de la caldera o los radiadores garantiza que tengan un rendimiento alto.
- No cubrir los radiadores, ya que necesitarán más energía para calentar la habitación.
- Calentar únicamente aquellas habitaciones que se usan.
- No ventilar la casa más de 10 minutos. Ese tiempo es suficiente para renovar el aire, pero sin perder todo el calor generado. Nunca ventiles con la calefacción encendida.
- Bajar las persianas o las cortinas cuando anochezca ya que así se reducen las fugas de calor. Durante el día, sobre todo si hay sol, haz lo contrario, abre las cortinas para que los rayos de sol calienten la casa.
Además de estas medidas, pueden aplicarse otras que requieren inversiones o incluso obras como mejorar el aislamiento térmico del hogar, colocar los radiadores bajo la ventana para calentar el aire que pueda entrar, entre otras.
Agua caliente de gas
Reducir el consumo de agua caliente no solo conllevará reducir el consumo de gas sino también de agua, por lo que el ahorro se producirá en dos facturas:
- No dejar el agua caliente correr. Cerrar los grifos cuando no se están utilizando.
- Ducharse en vez de bañarse reduce la cantidad de agua caliente empleada.
- Emplear el programa de agua fría de la lavadora, en caso que el equipo obtenga el agua caliente del calentador de gas.
Cocinas de gas
Reducir el consumo en este ámbito está relacionado con aplicar medidas de cocina eficiente, que también son aplicables a otro tipo de cocinas:
- No abrir el horno cuando se está cocinando sino es imprescindible ya que se pierde el calor.
- Tapar la ollas, de esta manera se alcanza la temperatura de cocción antes y se necesita menos tiempo para cocinar.
- Utilizar utensilios específicos para cada tipo de cocina. Estos estarán diseñados específicamente por lo que cocinarán más rápido y mejor.
- Emplear el calor residual para terminar de cocinar.
Como hemos visto existen diferentes medidas para ahorrar gas que son acciones que podemos hacer sin ningún coste adicional y que pueden suponer diferencias importantes en la factura final. ¿Conoces alguna otra medida para ahorrar en tu factura?