Según los datos que aporta la Fundación para el Desarrollo Eléctrico (Fundelec), en total, la demanda neta del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) fue de 11.128,8 gigavatios por hora (GWh), frente a los 10.806,8 GWh de enero de 2012. La energía térmica, con un 65% del total, fue ese mes la principal fuente de energía, seguida de la hidroeléctrica (29,6%) y la nuclear (5,1%).
Así las cosas, no sorprende que desde el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) se haya puesto en marcha una iniciativa mediante la cual estrecha su colaboración con las comunidades para asesorarla sobre cómo realizar un consumo energético más eficiente. Esta asistencia técnica a los municipios de todo el país se ha marcado un ambicioso objetivo: reducir el consumo hasta en un 40%, lo que a buen seguro redundar en una caída de la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera. No se trata de reducir el alumbrado de las calles, sino de hacerlo más eficientes mediante, por ejemplo, la utilización de luminarias de bajo consumo.
En este sentido, técnicos del INTI ayudarán a los de los municipios que así lo soliciten a realizar ensayos en el alumbrado público para medir cómo éste distribuye la luz y si es posible optimizarlo no sólo modificando las tecnologías, sino variables como la altura o la distancia entre los múltiples puntos de luz, por ejemplo.
En realidad, se trata de una especie de auditoría de iluminación en toda regla, revisando qué instalaciones reciben el mantenimiento adecuado o si se encuentran abandonas, que potencia tiene cada punto de luz, su hermeticidad para sacar su máximo rendimiento antes las distintas condiciones climáticas que sufre, etc.
Asimismo, desde el INTI se está barajando la posibilidad de dar el salto a las luminarias LED, si bien todavía se ve esta tecnología con cierta cautela debido, fundamentalmente, a una cuestión de precio. A pesar de su eficiencia, facilidad para ser recicladas y el hecho de no utilizar mercurio, el INTI cree que aún no es posible generalizar su implantación en todos los municipios por la inversión que sería necesario afrontar.
Quizás proyectos similares al arrancado recientemente por un grupo de empresas, con el apoyo de la Cámara Argentina de Máquinas de Oficinas, Comerciales y Afines (CAMOCA), ayuden a hacer más afrontable este tipo de lámparas: la unión UFI Luz (Unión Fiduciaria Industrial) producirá dos millones de lámparas LED para el mercado doméstico y la exportación.
Fuentes: Twenergy / terra.com / perspectivasur.com / prensa.argentina.ar / Telam / Flickr