Los creadores de esta idea -que seguro revolucionará el mercado de los cargadores solares- son los diseñadores Kyuho Song & Boa Oh. El invento es sencillo y fácil de usar: el enchufe fabricado de plástico incluye un pequeño panel solar con células fotovoltaicas en uno de sus lados. En el otro, una ventosa permite poder adherirlo al cristal de una ventana. Un pequeño convertidor se encarga de transformar la energía solar en electricidad y una batería permite almacenar lo que no utilicemos para aprovecharlo cuando no hay sol (por ejemplo, por la noche).
Este gadget ecológico, que incorporar las energías renovables a nuestra vida cotidiana, necesita entre cinco y ocho horas de sol para carga sus baterías al cien por cien. El invento cuenta con una capacidad de carga de 1000 amperios hora (el equivalente a 10 horas de duración), suficiente para enchufar un móvil o una tableta. El siguiente reto de los diseñadores es dar un paso más y crear un enchufe solar que sirva para cargar potencias mayores.
Fuentes: Ecoinventos / Yanko Design / imagen: Yanko Design