Solux es el nombre con el que se ha bautizado un valioso invento de iluminación natural y bajo consumo energético que podría ser una interesante solución para las viviendas de interés social. En la mayoría de los hogares de bajos recursos, la luz natural es escasa, lo que se suma a la necesidad real de ahorro, debido a esos bajos recursos económicos. Esto ha motivado a Diana Marcela Castro, diseñadora industrial de la Universidad Industrial de Santander, UIS, a realizar su proyecto de grado en torno a la solución de Solux. Luis Eduardo Bautista es el profesor que la ha dirigido en su trabajo. “Lo que buscamos es democratizar el diseño, entregar un producto que no es accesible a este tipo de población”, explicaba Bautista. Se trata de un punto, desde luego, muy significativo del invento, puesto que los artículos de bajo consumo suelen ser más costosos.
Solux recoge y concentra los rayos solares y los dirige hacia el interior de las casas para conseguir una mayor iluminación. Según su creadora, al implementar este dispositivo se logra reducir en un 43% el consumo energético. Fabricado con aluminio y vidrio, se trata además de un invento con materiales reciclables, por lo que su impacto ambiental es bajo. Es decir, a diferencia de otros dispositivos de bajo consumo eléctrico, como los bombillos, al culminar su vida útil no se transforma en un objeto contaminante.
¿Cómo funciona?
Solux cuenta con un reflector y un subreflector para dirigir la luz al interior de un conducto, con un sistema óptico telescópico llamado Schmidt-Cassegrain.
El invento consiste en un recolector con forma de platón pequeño ubicado en el exterior de la vivienda encargado de recoger la luz y enviarla hacia el interior. La luz viaja a continuación por un tubo de aluminio reflectante, recubierto de PVC, encargado de aislar los efectos térmicos de la radiación solar. Un difusor fabricado con vidrio esmerilado es el punto final de este circuito, y el encargado de distribuir la luz dentro de la casa. La potencia de Solux se calcula entre 180 y 240 lux de iluminación. El tubo mide cerca de dos metros de largo, con 10 centímetros de diámetro, unas dimensiones menores que las de los tubos convencionales.
De momento, sus creadores trabajan por perfeccionar el modelo, que alcanza temperaturas muy altas que los diseñadores esperan aprovechar como energía de algún modo. La idea es que en un futuro Solux pueda incorporarse en la construcción de las viviendas sociales (se han reunido también con el Instituto de Vivienda de Interés social y Reforma Urbana de Bucaramanga – INVISBU).
Fuentes: Cátedra Libre de la IUS | Vanguardia.com