En esta ocasión, Liz Sanchez, corresponsal de México, nos cuenta cómo se han implementado en su país sistemas de eficiencia energética y energías limpias a través del programa Crediwatts de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) del Gobierno Mexicano.
México tiene como meta de mediano plazo que el 35% de la energía eléctrica provenga de fuentes no fósiles. Esta meta es sin duda muy ambiciosa, particularmente porque en la actualidad, únicamente alrededor del 15% de la generación eléctrica en el país proviene de fuentes primarias de energía no fósil, han señalado expertos en energía del Banco Mundial.
De hecho, la meta oficial es aún más amplia. De acuerdo a la Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables y el Financiamiento de la Transición Energética de México (LAERFTE), se establece como meta una participación máxima del 65% de combustibles fósiles en la generación de energía eléctrica para el año 2024, del 60% en 2035 y del 50 por ciento en 2050.
El sol, el viento y el agua, se están convirtiendo en el nuevo petróleo de América Latina. La región está adoptando cada vez más fuentes de energías renovables, para satisfacer de manera ecológica la enorme demanda de electricidad de sus economías que, para el 2030, se duplicará.
Ciudades como Tijuana y Monterrey se transforman en ciudades sustentables especializadas en el ahorro energético vía el programa de Crediwatts que es una iniciativa del Gobierno de México en la que se invitan a los ciudadanos a utilizar energías limpias y fomentar el ahorro de energía (un ahorro de alrededor del 70 % tanto de ahorro de energía como en la factura). Por ello cada día se suman más ciudadanos a esta iniciativa fomentando el ahorro energético en locales comerciales y viviendas.
Este tipo de telegestión permite una mejor comunicación dado que sustituye los viejos contadores, por un contador inteligente que funciona digitalmente y permite transferencias de información teniendo el control sobre la energía generada y el consumo.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) además ofrece aplicaciones inteligentes (Apps) para saber la cantidad de emisiones de CO2 que estarán evitando, reduciendo así los efectos del cambio climático y contribuyendo a un mundo más sustentable.