Pero, ¿qué es un LED? Se trata de un diodo emisor de luz que puede insertarse en distintos soportes diseñados teniendo siempre en cuenta las cualidades y necesidades del componente LED. Éste requiere de un buen disipador de calor o una buena ventilación, porque al igual que otro tipo de luces produce energía en forma de calor. Asimismo emite una luz direccional y muestra una alta eficacia lumínica con un bajo consumo de energía, una ventaja que permite un enorme ahorro económico.
Aunque muchos no nos hayamos dado cuenta antes, llevamos conviviendo con los dispositivos LED desde la década de los años sesenta, cuando comenzaron a ser utilizados como visualizadores de encendido y apagado en muchos de los electrodomésticos que poseemos. Televisores, equipos de música, teléfonos – por indicar unos pocos -, incluyen en su estructura LED rojos y verdes para señalizar su estado. En los años noventa se obtuvieron los primeros LED azules en Nichia Corporation, descubiertos de manera casual por el ingeniero Shuji Nakamura al hacer rebotar un láser en una placa de zafiro. El LED azul permitió generar luz blanca al combinarlo con LED de otros colores, abriendo un espectro de posibilidades hasta entonces inimaginable.
Las mejoras en la creación de luz blanca están ligadas al uso de LED azules y filtros de fósforo, que generan una suave luz blanca de gran luminosidad, apta para sustituir a las formas de luz tradicionales por su calidad y bajo consumo energético: un 90 % menos que una bombilla incandescente y alrededor de un 30% menos si se compara con un fluorescente.
Como Holly Solar nos mostraba en el vídeo, en la actualidad se está experimentando con filtros de fósforo removibles que prolongan la vida media del dispositivo lumínico e incrementan su luminosidad e intensidad sin un mayor gasto de energía.
En los Estados Unidos el mayor apoyo del gobierno está dirigido a la investigación y desarrollo de dispositivos de luz de estado sólido y hacia la regulación de estándares y calidad en su fabricación. Asimismo se apoyan distintos planes para la sustitución de alumbrado urbano tradicional por luces LED y su uso en la señalización digital. Se está extendiendo su instalación en edificios de oficinas, grandes superficies, y entre los ciudadanos concienciados con la disminución de su huella de carbono. De hecho algunas compañías eléctricas reembolsan parcialmente el coste de sustitución.
El futuro de los dispositivos de luz de estado sólido pasa por su utilización como transmisores de datos y señales analógicas a distancia, y el desarrollo de LED orgánicos. Estos últimos son biodegradables, delgados, de bajo costo y con una mayor gama de color, son utilizados ya como dispositivos visualizadores en teléfonos móviles, cámaras y mp3 players, y se espera se expanda su uso conforme mejore su tecnología.
Ciertamente, el futuro está en imitar a la naturaleza. Se busca poder estabilizar y prolongar la irradiación de microcristales que añadidos a distintos objetos. Como se muestra al final del vídeo, los proveen de la capacidad de irradiar la luz capturada del sol y otras fuentes. Su uso podría ser de interés en señalizaciones de emergencia, caminos, luz ambiental, etc. Éste y otros campos de investigación están recibiendo atención por parte de investigadores de universidades estadounidenses.
Los LED suponen un gran ahorro energético, la única forma de vivir de manera sostenible y contribuir a la preservación de nuestro planeta.