Energía hidráulica
La energía hidráulica o energía hídrica es una fuente de energía renovable que aprovecha la caída de agua desde una cierta altura para generar energía eléctrica. Se aprovecha así la energía cinética de una corriente o salto de agua natural.
Para conseguir aprovechar esa energía se aprovechan los recursos tal y como surgen en la naturaleza (por ejemplo, cataratas, gargantas, etc.) o se construyen presas. Las instalaciones más comunes hoy en día son las centrales hidroeléctricas.
Si quieres saber más sobre la energía hidráulica, sus ventajas y desventajas y descubrir sus curiosidades no te pierdas estas páginas.
¿Qué es la energía hidráulica?
La energía hidráulica, también conocida bajo el nombre de energía hídrica, está estrechamente relacionada con una de las fuentes naturales más importantes que nos suministra el planeta Tierra: el agua. Por este motivo, la energía hidráulica es uno de los tipos de energías renovables que existen.
Trabajando a partir de la energía cinética y energía potencial, la hidráulica aprovecha las corrientes de agua para transformarlas en electricidad. El procedimiento inicia con el paso del agua a través de las turbinas hidráulicas, donde los alternadores recogen la energía y la convierten en electricidad.
Si quieres conocer todo lo que tiene para ofrecernos este tipo de energía, no te pierdas el contenido que hemos preparado para ti en nuestro blog. Aquí encontrarás los beneficios, desventajas, tipos o ramas, principales proyectos hidroeléctricos que han destacado en el mundo, ¡y mucho más!
Centrales hidroeléctricas
Los pasos para convertir el agua en energía eléctrica se realizan en instalaciones de gran tamaño que reciben el nombre de presas o centrales hidroeléctricas, las cuales están compuestas por molinos hidráulicos, turbinas y generadores que trabajan activamente para recuperar la energía del agua de los ríos y transformarla en electricidad.
Estas construcciones se ubican, por lo general, en terrenos extensos, libres de edificaciones en sus alrededores y donde existan buenas condiciones climáticas. Por supuesto, las represas hidroeléctricas (como también se les conoce) deben ser instaladas en áreas cercanas a ríos.
Dentro de las centrales hidroeléctricas encontramos algunos tipos que varían de acuerdo a la forma en la que se obtiene la energía. Os lo explicamos a continuación.
Tipos de centrales hidroeléctricas
Al hablar de centrales hidroeléctricas debemos hacer mención a tres tipos de presas:
• Centrales de agua fluyente: estas instalaciones captan el agua de los ríos a través de una parte de sus caudales, la conducen hacia las presas hidroeléctricas y, una vez utilizadas, las retornan hacia los ríos.
• Centrales de pie de presa: se ubican justo debajo de los embalses que aprovecha la energía eléctrica para el almacenamiento del agua. Este tipo de represas son útiles para controlar el caudal de los ríos.
• Centrales de canal de riesgo: a través de la instalación de una tubería interna, estas centrales utilizan los desniveles que pueda haber entre el canal del río y la central para aprovechar la corriente de agua, transformarla en energía y devolverla al río.
Ramas de la energía hidráulica
Dentro de la definición de energía hidráulica encontramos subtipos o ramas relacionadas a ella que varían, principalmente, de acuerdo al lugar de donde se extrae el agua para generar energía eléctrica. De esta manera, podemos decir que existen dos ramas de la energía hidráulica:
• Energía mareomotriz: tal como su nombre ya lo adelanta, la energía mareomotriz obtiene energía a través del agua de las mareas.
• Energía undimotriz: en este caso, la electricidad se extrae del movimiento de las olas del mar. Por lo tanto, en esta rama de la energía hidráulica vemos cómo actúan dos fuentes naturales: el agua y el viento.
La energía hidráulica en España
En España, la energía hidráulica es una de las energías renovables más consolidadas. De hecho, contamos con una de las proporciones en embalses hidroeléctricos más altos de Europa y del mundo entero.
Cataluña, Galicia y Castilla y León son las comunidades autónomas donde podemos encontrar mayor número de recursos hidroeléctricos. Sin embargo, poco a poco vemos cómo se desarrollan más proyectos relacionados a esta energía renovable en el resto de provincias.
Ventajas de la energía hidráulica
El aprovechamiento del agua para generar electricidad trae consigo algunos beneficios que os compartimos a continuación:
• La energía hidráulica es de alto rendimiento gracias a su fuente natural: el agua.
• Durante su producción no se generan emisiones de gases contaminantes que perjudiquen al medio ambiente.
• Como mencionamos antes, existen centrales hidroeléctricas que almacenan el agua para su futuro aprovechamiento.
• Las presas hidroeléctricas tienen una larga vida útil y no suponen altos costes operativos.
• La producción de este tipo de energía abre oportunidades de empleo para muchas personas alrededor del mundo.
Desventajas de la energía hidráulica
A pesar de que la energía hidráulica cuenta con importantes beneficios, también tiene algunos puntos en su contra que, por supuesto, os explicamos en los siguientes puntos:
• Trabajan a partir de un recurso “inagotable”: el agua. Aunque pueden autoabastecerse gracias a ella, cada vez son más las regiones que no tienen acceso a este líquido vital, por lo que el término “inagotable” está en juicio.
• La construcción de represas hidroeléctricas afecta a los ecosistemas tanto terrestres como marinos, debido a las instalaciones que deben realizarse en terrenos y mares.
• Las turbinas y el resto de equipos que utilizan las centrales hidráulicas pueden provocar cambios en las corrientes naturales de los ríos.
• Los factores meteorológicos pueden afectar la corriente de los ríos y provocar cambios en las labores de este tipo de energía.