En España, se estima que dos tercios de este residuo acaba en las alcantarillas. Si el aceite doméstico llega a los ríos, se forma una película superficial que afecta al intercambio de oxígeno y daña gravemente a los seres vivos del ecosistema. Según Analía, si tenemos en cuenta que un litro de aceite contamina 1.000 litros de agua y que una persona genera una media anual de cuatro litros de aceite, con la Fábrica de Jabón dejaría de contaminar 333 centilitros de agua mensuales.
La Fábrica de Jabón, una idea desarrollada bajo los proyectos sociales Socialnest, está basada en «la forma tradicional de hacer jabón de las abuelas de toda la vida«, pero da un paso más: «industrializa» el proceso. Con forma de una pequeña caja blanca, cuenta con un depósito superior donde echar el aceite. Éste cae en un bol interno donde se mezcla con agua y sosa cáustica durante 75 minutos. Después la mezcla cae automáticamente en un molde. En 48 horas tenemos una pastilla de jabón que podemos partir con la mano. Es posible incluso añadir alguna fragancia para obtener jabón con olores. Otra ventaja es que es un aparato de bajo consumo, ya que aprovecha el calor emitido en la reacción química permitiendo de este modo reciclar el aceite sin tener que consumir otro recurso más como la electricidad para generar calor.
Analía, que cursó sus estudios de ingeniería industrial en la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y cuyo proyecto ha sido ganador del primer premio nacional del concurso internacional de diseño James Dyson Award, prepara la salida de este nuevo electrodoméstico al mercado. Si bien aún no se conoce su precio final, ya es posible hacer el pedido a través de su web.
¿Y tú? ¿Te animas a hacer jabón en casa con aceite usado? ¿O ya lo haces? ¡Cuéntanos cómo!
Fuentes: Twenergy / La Fábrica de jabón / imágenes © La Fábrica de Jabón