La energía geotérmica es una energía renovable que aprovecha la energía calorífica de la Tierra para generar calor o electricidad dependiendo de la temperatura que alcance el subsuelo.
Para poder producir electricidad a partir de la energía geotérmica son necesarias ciertas condiciones de presión y temperatura (mayor a 150 ºC) que sólo se alcanzan en algunas localizaciones puntuales. Pero el aprovechamiento del calor de la energía geotérmica puede darse en cualquier parte del planeta.
La energía geotérmica del subsuelo español tiene potencial para producir 700 GW eléctricos, pero todavía se encuentra en fase de desarrollo. Aún no existe ninguna instalación geotérmica de alta temperatura en España. Lo que hay son yacimientos geotérmicos de baja temperatura.
La energía geotérmica para calefacción y suministro de agua caliente sanitaria se utiliza en balnearios y únicamente para calefacción en viviendas, colegios…, así como en recintos agrícolas (invernaderos).
Para satisfacer las necesidades de calefacción en el hogar se utilizan los sistemas de bomba de calor geotérmica, que también pueden utilizarse para refrigeración y agua caliente sanitaria.
Funcionamiento de la calefacción geotérmica
El funcionamiento de la calefacción a partir de energía geotérmica se basa en el funcionamiento básico de una bomba de calor, en el que se realiza la transferencia del calor interno del subsuelo al agua del circuito cerrado de la instalación. El proceso se invierte en verano para la refrigeración.
En el mercado existe una amplia gama de bombas de calor de distintos tipos y potencias, asequibles económicamente y que no precisan de personal excesivamente cualificado para su instalación y mantenimiento.
Sistema de calefacción más eficiente para el hogar
El coeficiente del rendimiento (COP) de una bomba de calor geotérmica suele alcanzar valores de entre 4 y 6, mucho mayores que los de los equipos de aire acondicionado más eficientes de aire. Esto equivale a un rendimiento del 400% o 600% o, lo que es lo mismo, que intercambia de 4 a 6 veces más energía que la que consume.
Si lo comparamos con calderas convencionales de gas o gasóleo, la diferencia en eficiencia es mucho mayor, puesto que estas últimas tienen rendimientos inferiores a la unidad.
Esta eficiencia se debe a las condiciones constantes que se encuentran en el subsuelo, con una temperatura en torno a los 15ºC.
Si, además, se combina con una instalación de suelo radiante, reducimos las pérdidas que se dan en las conducciones.
¿Veremos próximamente más instalaciones de calefacción geotérmica en las viviendas?
Fuente: Elaboración propia /FENERCOM/
Imagen: ©Slavomir Valigursky/ Dollar Photo Club