La certificación LEED proporciona un sistema de evaluación de la sostenibilidad en la edificación valorando su impacto en siete áreas principales:
– Emplazamiento sostenible
– Eficiencia en el uso del agua
– Eficiencia energética, energías renovables y emisiones a la atmósfera
– Materiales y recursos naturales
– Calidad del ambiente interior
– Innovación en el diseño
– Prioridad regional, donde se premian las necesidades locales elegidas por cada país
Proceso de certificación
El proceso de certificación LEED lo realiza el USGBC, que delega sus funciones en certificadores acreditados por ellos mismos, los llamados LEED-AP. El proceso de certificación exige una extensa recopilación de información sobre el proyecto, un riguroso análisis de los condicionantes de diseño y la solución implantada, así como la realización de cálculos, simulaciones y otras medidas justificativas. La obtención del certificado requiere pasar por las siguientes fases:
1. Registro del proyecto en el USGBC
2. Definición del tipo de certificación a la que se opta
3. Pre-evaluación: a partir de los datos obtenidos, intenciones y metas del proyecto
4. Solicitud de la certificación
5. Revisión y certificación
Tipos de certificación
Como indicamos en el punto anterior existen diferentes certificaciones a optar en LEED dependiendo del tipo de edificio, cada una con su correspondiente guía de certificación específica:
– LEED NC: edificios de nueva construcción y grandes remodelaciones
– LEED EB: edificios existentes, donde se evalúa la operación y mantenimiento del edificio
– LEED CI: mejora de interiores comerciales y de espacios con inquilinos
– LEED CS: núcleo y envolvente, ayuda a implantar el diseño sostenible en las nuevas construcciones de núcleo y envoltorio
– LEED H: diseño y construcción de viviendas
– LEED ND: aplicación en desarrollos urbanísticos
Categorías de certificación
Dentro de cada tipo de certificación se pueden conseguir diferentes categorías, en función de los créditos obtenidos, definidos en la guía de certificación correspondiente. Parte de estas exigencias, los “requisitos”, son de obligado cumplimiento para obtener la certificación, mientras que el resto son de carácter optativo y permiten conseguir un mayor número de créditos.
Las categorías LEED son las siguientes:
– LEED Platino: para edificios que obtienen 81% o más de los créditos disponibles
– LEED Oro: para edificios que obtienen entre el 71 y el 80%
– LEED Plata: para edificios que consiguen en la franja del 61 al 70% de los créditos
– LEED Bronce: para edificios que obtienen entre el 50 y el 60% de los créditos
LEED en España
A pesar de que LEED se puede aplicar en España desde el año 2000, su implantación en nuestro país no se ha generalizado como ha ocurrido en EEUU. Actualmente, según el Green Building Council España, sólo hay una treintena de edificios con certificación LEED y unos noventa registrados para poder ser certificados en un futuro.
Esta situación se debe principalmente al desconocimiento de la certificación LEED por el público en general y a la dificultad de su obtención, ya que debe ser realizada por una persona certificada LEED-AP y conlleva un coste adicional para el proyecto.
LEED se presenta como la certificación que engloba todos los aspectos positivos a tener en cuenta en la construcción y el uso de un edificio, en lo referente a la eficiencia energética y a los recursos utilizados, respetando el medio ambiente.
Fuentes: Twenergy / USGBC / SPAINGBC / Wikimedia Commons