Los flujos económicos han ido ganando fuerza y suponen ir un paso más allá, dejando patente que las sociedades más desarrolladas han asumido el reto de producir, consumir, reciclar, reutilizar y actuar de manera responsable.
Algo que presupone el abandono de obtener el máximo rendimiento a corto plazo sin tener en cuenta los recursos disponibles y la presión sobre las materias primas. Es aquí donde está el quid de la cuestión, la sostenibilidad ante el aumento imparable de la población mundial y su inmensa demanda.
En un comunicado reciente, el Gobierno extremeño informaba de este proyecto, que se lleva a cabo a través de la Fundación del Parque científico y Tecnológico, FUNDECYT-PCTEx.
El encuentro de lanzamiento del proyecto tuvo lugar en Badajoz y cuenta con un presupuesto de 1,6 millones de euros, financiados por el programa Interreg Europe a través de Fondos FEDER.
Estos recursos se destinarán durante cinco años a desarrollar actividades basadas en los flujos económicos, como sistemas de transformación de residuos, el uso de materias primas secundarias y la creación de mercados regionales de este tipo de materias.
También se priorizará la Compra Pública Verde, un sistema de contratación de productos y servicios que considera no sólo los aspectos económicos o técnicos sino también el impacto ambiental de los mismos en todo su ciclo de vida.
El concepto de economía circular parte de la premisa del agotamiento de recursos, debido al actual sistema lineal, basado en la extracción, fabricación, utilización y eliminación.
SYMBI como se conoce el proyecto, impulsa un nuevo modelo de sociedad sensibilizada que utiliza y optimiza recursos, materiales, energía y residuos, lo que contribuye a la seguridad del suministro y a la reindustrialización del territorio nacional.
En el marco de este proyecto, se llevarán a cabo diferentes acciones de intercambio de experiencias entre las autoridades regionales de los países participantes y los actores clave relacionados con el uso eficiente de los recursos.
El consorcio del proyecto está compuesto por socios procedentes de España, Polonia, Italia, Eslovenia, Hungría, Grecia y Finlandia, con entidades que van desde universidades, consejerías, agencias de desarrollo y cámaras de comercio.
¿Sabías que los flujos económicos podrían aportar a la economía mundial algo más de cuatro billones y medio de dólares en 2030? Lo que supone cuatro veces el tamaño de la economía española.
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