Este tipo de envase tarda alrededor de cien años en descomponerse, y tan sólo el 10% acaba en los contenedores amarillos para su reciclaje, aunque, según Cicloplast, asociación para el reciclado del plástico, un 65% de ellas suele ser reutilizado como bolsas de basura. Pero después la mayoría de ellas acaba su ciclo en vertederos o en las costas. El 20% de la basura recogida de las playas son bolsas.

Todo esto ha empezado a cambiar gracias al «Plan Nacional Integrado de Residuos«, en el que estaba previsto que el consumo de este tipo de bolsas se redujera un 50% en 2010, fecha a partir de la cual deberán ser prohibidas progresivamente.

En Europa hacer pagar por las bolsas de plástico ha demostrado ser la manera más efectiva para reducir su uso. Irlanda impuso, desde 2002, una tasa de 0,20 euros sobre las bolsas, lo que ha reducido su consumo en un 70%. Desde entonces, la iniciativa se ha extendido a varias ciudades de Reino Unido. En Alemania y Bélgica los clientes también pagan por las bolsas. En Estados Unidos, la ciudad de San Francisco fue pionera en el cobro de las bolsas. En otros países, como en China, el Gobierno ha prohibido a los comercios distribuir bolsas desde hace años.

Las alternativas más sostenibles

Entre las alternativas más ecológicas se encuentran las bolsas de fécula de patata. La empresa Sphere fue pionera, en 2007, en la fabricación de estas bolsas alternativas al plástico. Por su parte, la Confederación de Empresarios de Plásticos (Anaip) apoya la bolsa de polietileno, que puede ser reutilizada unas 15 veces, y para la que ya están certificando la norma Aenor (Asociación Española de Normalización y Certificación). El polietileno es un derivado del plástico reciclable y reutilizable. Estas bolsas alternativas son algo más caras, pero su coste ecológico es mucho menor. Esto se debe a que, al ser reutilizables, su uso puede hacer que cada consumidor ahorre a lo largo de su vida unas 18.000 bolsas de un solo uso, y cada español dejará de consumir el 93% de las bolsas que empleaba al año.

Fuentes: Elaboración propia / El Pais / flickr

Rate this post

Write A Comment

Guardar en Pinterest