Carga por contacto
Unas de las posibilidades que se considera es aprovechar el continuo contacto que tenemos con los móviles para cargarlos a través de la energía térmica corporal que liberamos. Esta idea la ha desarrollado Raquel Gracia, licenciada en Ingeniería de Telecomunicaciones, en su proyecto fin de carrera “Desarrollo de fuente de alimentación para captación y aprovechamiento de la energía térmica corporal”. Esta idea ha ganado el I Premio de Innovación Energética de la Fundación Asturiana de la Energía (FAEN).
El funcionamiento de este invento se basa en tres herramientas claves:
– Células “Peltier”: perciben los cambios de temperatura.
– Conversor: transforma la energía térmica corporal en eléctrica.
– Condensadores de energía: almacena picos de energía.
Aunque el proyecto se desarrolló con un mando a distancia de un aparato de aire acondicionado, Raquel Gracia manifestó que “este proyecto podría aplicarse a teléfonos móviles pero habría que mejorarlo muchísimo”. Una de las mejoras necesarias sería conseguir mayores cantidades de energía del condensador.
Carga por captación de la luz
Otra forma de decir adiós al cargador del móvil se le ha ocurrido a Amador Menéndez, otro científico asturiano, y a su equipo, que trabajan en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (las siglas en ingles MIT). Amador Menéndez ha dirigido una investigación que desarrolla una tecnología que permite la recarga automática de móviles y otros dispositivos utilizando luz solar o artificial.
Considerando que las pantallas ocupan gran parte de la superficie del móvil, y que se requiere de un consumo energético muy elevado para ofrecer una buena calidad de imagen, Amador Menéndez y su equipo han desarrollado una tecnología que aprovecha la radiación solar o la luz artificial de las estancias para cargar la batería del móvil. La tecnología se centra en guiar la luz a los bordes de la pantalla, donde están localizadas unas pequeñas células solares que la convierten en electricidad.
Además de captar la luz del exterior, esta tecnología es capaz de reciclar la luz blanca trasera que emite el propio dispositivo y que no es aprovechada. Aprovechando esta luz, se consigue un aumento en la eficiencia de los móviles, ayudando así, a que la batería dure más tiempo.
Estas tecnologías se encuentran todavía en desarrollo, pero pronto se conseguirá con ellas una menor dependencia de la electricidad asociada a estos dispositivos, y una mayor comodidad, al no estar pendiente del nivel de batería.
Fuentes: Twenergy / Diario Independiente de Asturias / El País / ABC /Flickr