Mejoras en la Eficiencia Energética
Durante varios años, China ha invertido una gran cantidad de dinero en promover el ahorro energético, reducir las emisiones de efecto invernadero e impulsar las energías renovables. Concretamente, en 2012, esta inversión ha sido de 170.000 millones de yuanes (21.400 millones de euros).
Desde los años 90, China ha mejorado la eficiencia energética reduciendo su intensidad de carbono, es decir, disminuyendo las emisiones de CO2 en relación al PIB (Producto Interior Bruto). Esto refleja su compromiso con el medio ambiente, consiguiendo crecer sin aumentar sus emisiones de CO2 en la misma medida. A largo plazo los objetivos de reducción de emisiones que se han marcado para el 2020, van del 40% al 45%, respecto a las emisiones del 2003.
El proyecto de eficiencia energética de este país está respaldado por el Gobierno de China, el Banco Mundial y el Fondo Mundial para el Medio Ambiente (FMAM), a través de un programa de financiación comercial, que otorga préstamos para la eficiencia energética. Además, utilizan la figura de las empresas de servicios energéticos (ESCO, por sus siglas en inglés) para acometer las medidas de ahorro energético en las pequeñas y medianas empresas. Las ESCO ayudan a ahorrar dinero reduciendo el uso de energía.
Aunque el esfuerzo que está haciendo China en relación a la eficiencia energética, es muy elevado, aún hay grandes diferencias en relación a los países desarrollados. Con el objetivo de reducir estas diferencias, China ha puesto en marcha una serie de iniciativas a nivel nacional y, además, ha pedido la colaboración de Estados Unidos y de la Unión Europea para el intercambio de know-how.
Fomento de la Energía Solar Fotovoltaica
Otra de las medidas adoptadas por China para reducir las emisiones de CO2, es fomentar las energías renovables. Sus avances han sido tan grandes, que en estos momentos es el primer productor mundial en energía solar a baja temperatura y el cuarto productor de energía eólica.
Por otro lado, China busca aumentar la demanda nacional de energía solar fotovoltaica debido a que, aproximadamente, el 90% de las placas solares que fabrican son exportadas al extranjero y su política de ventas ha llevado a EEUU y a la EU a tomar medidas antidumping. Estas medidas implican una subida de los impuestos de exportación.
Para fomentar la energía solar fotovoltaica, China está tomando las siguientes medidas:
– Permitir que las plantas solares de menos de seis megavatios se puedan conectar gratuitamente a la red de abastecimiento nacional.
– Promover la aplicación de estas energías en edificios.
– Dar ayudas tecnológicas a las plantas solares de todo el país asiático.
– Conceder préstamos destinados a la construcción de nuevas plantas.
En los países en vías de desarrollo está teniendo lugar un mayor aumento de las emisiones de CO2 debido a que su industrialización ha comenzado más tarde. Lo que deben buscar estos países es una tecnología que no perjudique el medio ambiente. Por ello, el gobierno chino está invirtiendo en tecnologías limpias y pidiendo ayuda a aquellos países que están por delante en relación a eficiencia energética.