Pero Metro de Madrid quiere ir más allá para conseguir una mayor eficiencia y ha tomado una serie de medidas para conseguirlo:
– Situar la reducción de consumo eléctrico (la única energía que utiliza) entre uno de sus 4 proyectos estratégicos, y por lo tanto, una de sus principales prioridades.
– Puesta en paralelo de las subestaciones de tracción, con lo que han conseguido ahorros del 10-12%.
– Freno regenerativo, con lo que se recupera y almacena energía durante la frenada para utilizarla en el arranque. Esto ha supuesto un ahorro de 41 GWh/año, equivalente al consumo de toda la línea 2 o de más de 10.000 familias.
– Regulación automática del paso de los trenes para una conducción más eficiente. Un incremento del tiempo de 0,05% ha conseguido un ahorro del 10% de la energía.
– Mejora en el alumbrado exterior e interior de estaciones, talleres, oficinas…
– Ralentización de las escaleras mecánicas cuando no se usan.
– Uso de energía geotérmica para climatizar los andenes y cuartos técnicos en la estación de Pacífico.
– Uso de colectores solares térmicos sobre cubierta de edificios para la obtención de agua caliente.
– Se está analizando la posibilidad de hacer instalaciones solares fotovoltaicas sobre cubiertas para la generación de energía eléctrica.
– Está en fase de proyecto el diseño de un vagón más ligero, con materiales plásticos, lo que supondrá un importante ahorro de energía.
2,5 millones de desplazamientos y 1 millón de personas distintas al día se benefician de estas medidas.
Fuente: Elaboración propia, Metro de Madrid.