¿Qué es el cicloturismo?
Es un tipo de actividad que combina el ciclismo y el turismo como elementos inseparables, aunque pueden emplearse otros medios de transporte si es inviable realizar todo el viaje en bicicleta. La idea no es competir sino disfrutar del viaje y del paisaje que lo rodea.
Normalmente, el cicloturismo consiste en una ruta de cierta longitud que se disfruta al ritmo marcado por las piernas del turista, parando a visitar aquellos lugares que se consideren interesantes.
La duración y la dureza del viaje son variables y adaptables a las necesidades de cada individuo. Se recomienda siempre valorar la forma física de cada uno antes de comenzar una ruta, para evitar lesiones o tener que abandonar antes de acabar.
¿Qué necesito para hacer cicloturismo?
Lo único realmente indispensable es disponer de una bicicleta preparada para el trayecto a realizar. Por norma general, son bicicletas robustas aunque ligeras diseñadas para transportar cargas pesadas mediante bastidores de equipajes.
Como complemento pueden realizarse las rutas con un coche de apoyo. Esto suele ser especialmente interesante si el viaje se hace con niños o personas con menor forma física que otras. Normalmente, los vehículos son de amigos o familiares o de la empresa organizadora. Así mismo, suele llevar también piezas de repuesto o un botiquín por si ocurriera algún incidente.
¿Dónde puede realizarlo cicloturismo?
Se puede realizar donde queramos, pero siempre se recomienda escoger rutas con poco tráfico ya que nos permitirá disfrutar más de la ruta al no tener que preocuparnos por los vehículos.
En todo el mundo existen gran cantidad de rutas creadas específicamente para el cicloturismo entre las que destacan:
– Camino de Santiago: una ruta, cuyos tramos más conocidos son lo que discurren por España, pero existe por toda Europa. Casi desde cualquier punto de continente puede llegarse a Galicia siguiendo estos caminos.
– Transpiranaica: se trata de un trayecto que une el Mar Mediterráneo con el Mar Cantábrico a través de los Pirineos españoles y franceses.
– Great Divide: es un camino que recorre Estados Unidos de norte a sur que transcurre por la línea divisoria imaginaria que marca el punto en el que los ríos pasan a desembocar en el Pacífico en vez de verter sus aguas en el Atlántico o Golfo de México. Recientemente, esta ruta se extendió unos 400 km por el sur de Canadá.
– EuroVelo: es una red, basada en trayectos ya existentes o la creación de nuevos, impulsada por la Federación Europea de Ciclistas que tiene el objetivo de desarrollar una red de rutas de larga distancia que permita atravesar toda Europa.
Cabe resaltar que, aunque existan rutas ya creadas, en general, es el propio “cicloturista” el que diseña su propio itinerario adaptando el trayecto a sus necesidades y a sus características físicas. ¿Te animas a probar este tipo de turismo?
Fuente: Elaboración propia / Comunidad de Madrid / Rodadas / Flickr
