La biomasa es una de las energías renovables con mayor futuro y potencial en nuestro país porque tenemos grandes medios para generarla, como los recursos agrícolas y forestales. Sin embargo, aún estamos lejos de las cotas deseables y de explotarla como podríamos. Si quieres conocer las razones por las que la biomasa en España aún no está del todo desarrollada, aquí te las explicamos.

¿Qué es la biomasa?

Antes de hablar acerca del papel de la biomasa en España, queremos explicarte el significado de este término. Lo que llamamos biomasa es materia orgánica o industrial que se emplea para generar energía renovable derivada del aprovechamiento del proceso de combustión de esta misma materia. Normalmente, la biomasa se genera con sustancias de seres vivos o sus restos. También puede estar compuesta de hojas, restos de madera, desechos, entre otros.

Beneficios de la biomasa

Explicándolo de manera sencilla, si para el agricultor deshacerse de los residuos de sus cosechas siempre ha sido un problema, el uso de la biomasa es una salida. Esto se debe a que todos estos residuos pueden servir para producir electricidad, por ejemplo, a nivel doméstico o industrial.

Los productos procedentes de la biomasa que se utilizan para fines energéticos se denominan biocombustibles, y pueden ser sólidos (para fines térmicos y eléctricos) o líquidos (biocarburantes). Actualmente es posible utilizar energía procedente de biomasa de diferentes maneras, desde en plantas de generación de calor y electricidad hasta en aplicaciones para tráfico y transporte.

¿Dónde se da el mayor consumo de biomasa en España?

Centrándonos en nuestro país, este tipo de energía alcanza 45% de la producción de energías renovables, lo que equivale a 2,9% del consumo total de energía, incluidas las convencionales. Si prestamos atención a la distribución geográfica, veremos que el mayor consumo de biomasa en España se da en Andalucía, Galicia y en Castilla y León.

Dichas comunidades son las que cuentan con más industria consumidora de grandes cantidades de biomasa, esto se debe sobre todo a la existencia de un sector forestal desarrollado. También son comunidades donde la diseminación de la población facilita el uso de la biomasa doméstica.

Andalucía en la primera posición

Andalucía es puntera en obtención de energía eléctrica mediante biomasa, gracias a la existencia de numerosas y grandes industrias agroalimentarias. En los últimos años, el incremento del uso de biomasa en esta zona de España ronda 10% anual.

Casi 40% de toda la potencia de la biomasa en España está en Andalucía. La región cuenta con 18 plantas de generación eléctrica mediante biomasa, que suman una capacidad total instalada de 208,70 MW.

El desarrollo de la biomasa en España supone un retraso con respecto a otros países de Europa

Si en la Unión Europea (UE), y a nivel global, el recurso renovable que más se emplea es, con bastante diferencia, la biomasa y los residuos, en nuestro país su utilización para la generación de electricidad es aún menor que en la Europa de los 27.

El caso es que contamos con abundantes recursos primarios en toda España, pero el desarrollo de la biomasa se encuentra en una situación de retraso con respecto a otros países de nuestro entorno (el líder europeo es Alemania); además, aún somos altamente dependientes de los combustibles fósiles: el peso del petróleo en el consumo de energía primaria (48,8%) es superior a la media europea, y el gas natural supone 24% del consumo total de energía primaria (energía antes de ser transformada).

Si miramos cifras, España ocupa el sexto lugar en la UE en cuanto a producción de energía primaria a partir de biomasa sólida, tras Alemania, Francia, Suecia, Finlandia y Polonia. Pero, si atendemos a la producción de energía primaria a partir de biomasa sólida, en producción por habitante en la UE en 2010, España ocupa el lugar 18, con una tasa de 0,103, por debajo de la tasa del conjunto de la UE, que es de 0,158, y muy lejos de la tasa que tiene Finlandia con un 1,435.

Finalmente, España ocupa el décimo puesto en cuanto a la producción bruta de electricidad a partir de biomasa sólida, y a mucha distancia de los países en los primeros lugares.

¿Es que acaso no podemos producir más biomasa en España?

Los expertos no opinan esto. Más bien al contrario, consideran que nuestros recursos de biomasa para la producción energética demuestran que somos un país con un elevado potencial para incrementar las cuotas de producción de biomasa en el mix energético. Y, sin duda, debemos hacerlo.

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