Explicado de manera sencilla, un servidor es un ordenador remoto cuya finalidad es proveer los datos que son solicitados por parte de un cliente y devolverle una respuesta en concordancia.
Los servidores hacen posible que los clientes, que normalmente se conectan a través de la red, compartan datos, información y recursos de hardware y software. Existen muchos tipos de servidores dependiendo de la información que se quiera guardar: servidor de base de datos, de archivos, de impresión, de correo, de juego, de aplicaciones, servidor web…
En las empresas, los diferentes servidores se agrupan en lo que se conoce como Centro de Procesamiento de Datos (CPD). Son instalaciones que se incorporan para que tengamos la información necesaria en las operaciones de nuestra empresa.
Estas instalaciones consumen gran cantidad de electricidad, debido a que están en funcionamiento 24 horas y a que es necesario refrigerarlas continuamente. Además, el impulso del uso de soluciones en la “nube” provoca un considerable aumento del consumo energético de estos CPDs.
Para reducir el consumo energético de nuestros CPDs pueden considerarse las siguientes medidas:
Este tipo de medidas cada vez son más utilizadas por empresas de todo el mundo. Facebook, Google o Apple, entre otras, están implantando medidas de eficiencia energética en sus servidores que aún van más allá.
Google decidió trasladar sus servidores a zonas favorables y ya cuenta con muchos servidores en medio del océano Pacífico donde, las condiciones climáticas y el uso de enfriamiento por evaporación, provocan una reducción del cincuenta por ciento del consumo de energía que en un CPD convencional.
Otro ejemplo es Verne Global, un centro de datos neutral en Islandia que, para mejorar su eficiencia, apuesta por fuentes de energía menos contaminantes como, por ejemplo, la energía hidroeléctrica y la geotermal.
Por lo tanto, se puede decir que la eficiencia energética en los servidores se consigue gracias a factores como el uso de energías renovables, la construcción eficiente, la virtualización, la gestión energética avanzada y la ubicación, entre otros.
La alternativa más factible para nuestros negocios es poner en marcha esas medidas de eficiencia en nuestras infraestructuras, o bien recurrir a los servicios de empresas proveedoras que son más eficientes a través de los servicios cloud.
También es recomendable considerar que la proximidad de los usuarios a los servidores proporciona un mayor control y disponibilidad de la información. Por ello, también en Colombia puede ser una gran idea que las empresas preocupadas por mejorar su eficiencia energética apuesten por proveedores con servidores ubicados cerca.
Ejemplos de empresas colombianas que ofrecen servicios de almacenamiento en la nube o web son Conexcol Cloud, Avanxo, Hosting Red y Host Dime Colombia. Estas empresas ofrecen servicios de diseño y control de aplicaciones webs, registro de dominios de internet, seguridad, comunicación, etc.
Teniendo en cuenta que el sector TIC es responsable actualmente de más del tres por ciento de las emisiones de carbono generadas nivel mundial, todas aquellas iniciativas de “Green IT” o tecnología verde, que promueven el uso eficiente y ecológico de los recursos informáticos, son realmente relevantes para lograr el ahorro energético y económico a la vez que se reduce el impacto ambiental de las empresas.
FUENTES: Elaboración propia / Circutor / Computer world
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